Descubriéndome...

"Piedra sobre piedra,
uñas doloridas que arañan la tierra
que les sostiene.
Pies fríos
sobre su manta cálida...

El mismo Sol, la misma lluvia,
el mismo viento que hiela
y comunica mi respiración con la tuya,
y mi cuerpo con tu cuerpo,
y mi espíritu con tu alma.

Ese sentimiento que se escapa,
y el secreto reprimido
que sonroja el rostro del que es consciente
de sus infiernos
sólo al pararse delante de su espejo."

Para mucha gente las palabras son simplemente acústica con unos segundos de vida, que se pronuncian con el único fin de perderse entre oídos ajenos, y hacerte sentir que alguien las escuchó con interés.
No se dan cuenta de algo que una vez escuché en Extrechinato y tú: "MENOS MAL QUE CON LOS RIFLES NO SE MATAN LAS PALABRAS...". No les pueden disparar, ni hacerles oídos sordos, porque están ahí se quiera o no, con toda esa carga escondida entre líneas que te bombardea...
Este puñado de letras es mi vómito, cuando no encuentro otra vía de escape, mi manera de reconciliarme con el mundo, de dar una patada a la indiferencia del que sabe que sólo soy un punto más, de gritar que siento, que crezco, que puedo odiar y querer al mismo tiempo. Y congelarme. Creo que también son la forma de hacerme inmortal. Porque no las puedo matar. Y tampoco hay suicidio. Sólo nacen.
(para Vane de Maitetxu....)